StoraEnso (léase, creo, stuuraenso) y Arauco han comprado los activos de Ence, con lo cual seguimos en el negocio. Hablemos un poco de ello, ya que me imagino que en el futuro nos tendremos que ocupar con cuidado de muchas cosas relativas a este tema.
StoraEnso es una industria integrada de papel, cartones y productos forestales. Es una empresa que nació en 1998 por la fusión de otras dos empresas bien antiguas, la industria sueca Stora, fundada en 1288 y la finlandesa Enso, fundada en 1872. Tiene unos 32.000 empleados y está presente en 35 países alrededor del mundo.
Su presencia en América Latina se manifiesta con fuerza en Brasil, donde participa en Veracel, y tiene tierras en proceso de forestación en Brasil y Uruguay, así como oficinas también en Argentina, Chile y México.
Como Uds. saben, Stora Enso está presente en Uruguay desde hace un tiempo, y ha adquirido tierras en el centro del país. Durante bastante tiempo se habló de que iban a instalar una planta de producción de pulpa en el centro del país, dudándose entre Durazno y Tacuarembó. Siempre se especuló que la política que seguían era un poco inconveniente, porque al anunciar por dónde querían instalarse, probablemente estaban sufriendo un alza especulativa de los precios de la tierra en los alrededores. Ahora han resuelto el tema de un plumazo.
Hoy lunes 18 de mayo, se conoció el siguiente comunicado
Montevideo, 18 de mayo de 2009. Arauco y la transnacional finlandesa-sueca Stora Enso han firmado un acuerdo con el Grupo ENCE de España para adquirir en conjunto y en partes iguales, un total de 130.000 hectáreas de terrenos forestales, plantaciones y otras operaciones que la empresa española tenía en las zonas centro y oeste del Uruguay. El valor de la transacción alcanza a US$ 343 millones.
“Uruguay tiene excepcionales condiciones para el crecimiento de plantaciones para fibra y su sector forestal se está desarrollando a gran velocidad. Estamos muy contentos de poder participar en este desarrollo junto con Stora Enso” dijo Matías Domeyko, CEO de Arauco.
Hasta hoy Stora Enso y Arauco eran propietarios, respectivamente, de 74.000 y 39.000 hectáreas de tierras en Uruguay. Después de esta compra a ENCE la superficie conjunta de terrenos forestales alcanzará un total de 255.000 hectáreas.
“Este es un paso muy importante en la estrategia de Stora Enso que, como lo hemos señalado, se basa fundamentalmente en materia prima para pulpa de costo competitivo y basada en plantaciones. Uniendo fuerzas con Arauco hemos alcanzado una superficie de 123.000 hectáreas de plantaciones en Uruguay. Esto asegura la base estratégica de abastecimiento de materia prima para una planta de celulosa de clase mundial que nos proponemos construir junto con Arauco después de completar los estudios de factibilidad y de inversión, y cuando las condiciones económicas y financieras puedan justificar una inversión de esta naturaleza. Esa decisión de inversión requerirá también una aprobación formal de ambos socios y de las autoridades uruguayas”, dijo Jouko Karvinen, CEO de Stora Enso.
El subrayado es mío, sólo para indicar que las intenciones de los sueco-finlandeses y chilenos no es plantar pinos y eucaliptus para hacer mondadientes precisamente (para desmayo de nuestros ocasionales contrincantes). En la transparencia de al lado se muestran las tierras y plantaciones que tienen en este momento disponibles StoraEnso y Arauco. De golpe y de repente tienen una base forestal suficiente como para instalar una pastera, cosa que -haciendo futurología- posiblemente anuncien sobre el final de este año. Nadie se gasta 350 millones de dólares para dejar la inversión durmiendo durante cinco años.
Las buenas noticias de que sustituiremos la problemática Ence por StoraEnso vienen un poco empañadas por algunas otras. Una es el hecho de que hay un segundo socio que es Arauco. Como Uds. saben, Arauco es Celulosa Arauco y Cosntitución S.A. responsable de Celco, la famosa pastera del problema de los cisnes de Valdivia. Más allá de que no haya sido probado que la pastera fuera responsable de ese desastre, lo cierto es que sí hubieron problemas ambientales constatados causados por ella (por ejemplo, vertidos incontrolados, olores) y está en el centro de una controversia en Mehuin por los mapuches que se oponen al vertido de los riles al mar. Curiosamente, esta es la solución correcta, dado que el vertido al pequeñísimo río Cruces fue al menos uno de los componentes del problema ecológico. No creo que los problemas que se dieron en Chile se vayan a dar en Uruguay por muchas razones (el consenso social en la zona donde se va a instalar la pastera, el control interno por la participación de los socios suecofinlandeses, el control estrecho de la Dinama, que tiene la experiencia de Botnia) pero es seguro que tanto como oimos hablar de Pontevedra, oiremos ahora hablar de los mapuches.
El segundo problema, y quizá mucho más real y sobre lo que habrá que actuar socialmente por parte de las empresas y el gobierno es la situación en la que quedará Conchillas. La planta a instalar no estará en Punta Pereira sino que casi seguramente estará en el entorno de Paso de los Toros, con lo cual nuevamente Conchillas pasará a tener los mismos problemas que en su momento la hacían languidecer. Ojalá que entre las empresas y el gobierno, y con el empuje de los vecinos que no bajen los brazos, consigan transformar este golpe en algo no tan fuerte.
Para el país la noticia es muy trascendente. A ojo de buen cubero, yo diría que es posible que estén empezando a construir el año próximo, con lo cual se iniciará nuevamente ese ciclo de contratación de obreros ahora en la zona centro del país. Esto ocurrirá en un año complicado, como el 2010, donde el contexto recesivo no se habrá levantado todavía y tendremos que estar pagando el agujero del déficit fiscal de este año. Tener una inmensa obra que se inicia va a ser a todas luces un empuje importante en el empleo y el dinamismo económico de la zona y de todo el país.
Ni que hablar que hay toda una generación de estudiantes que se reciben en las especialidades de la forestoindustria que tienen ahora un horizonte más despejado, al igual que los estudiantes de ingeniería química al visualizarse en el mediano plazo la pastera de StoraEnso y, más en el horizonte, la de Portucel.
Volveremos a hablar de estos temas seguramente.