martes, 24 de junio de 2008

...avive el seso y despierte...

 


Recuerde el alma dormida,
avive el seso y despierte
contemplando

cómo se pasa la vida,
cómo
se viene la muerte
tan callando,

cuán presto se va el placer,
cómo, después de acordado,
da dolor;

cómo, a nuestro parecer,
cualquiera tiempo pasado
fue mejor.


Con esta copla de Manrique quiero empezar esta reflexión sobre Uruguay. Los que me conocen saben que vivo en la Ciudad Vieja, cerca del Mercado del Puerto, y que trabajo en las inmediaciones del Palacio Legislativo.

Desde hace un par de semanas he tomado la costumbre de ir y volver caminando, lo que me permite recorrer la rambla portuaria y ver el tránsito infinito de contenedores y mercancías en grandes camiones, yendo y viniendo desde y hacia el puerto. Además de hacerle bien a mis arterias, y permitirme evolucionar desde una forma cuasi-esférica a algo más elipsoidal, el caminar me permite reflexionar sobre los cambios que estamos viendo en este país pequeño que, con toda justicia, ha dejado de ser el "paisito".

Hasta ahora hemos hablado de pasteras. Pasaron ya hace mucho los tiempos en que se especulaba con que Botnia se inauguraría en Noviembre de 2007 -en lugar de en Octubre- para permitir que pasaran las elecciones presidenciales argentinas. Pasó la inauguración del puerto de Ontur, que La Nación calificó como "tensa". Pasó ya el papelón de la postergación de la inauguración por pedido del Reino de España. Pasó la autorización para el inicio de las operaciones, concedida desde Chile. Pasó el primer informe de la Dinama, indicando que no se observó contaminación durante los primeros días de operación.

Y Botnia empezó a funcionar. Y se denunciaron olores. Y desmayos. Y accidentes y nubes tóxicas. Y lluvia de palomas muertas. Y polvo amarillo y asambleístas intoxicadas, y que daba poco trabajo... Y Botnia funcionó en Noviembre. Y en Diciembre. Y en Enero. Y en Febrero, en Marzo, en Abril, en Mayo y sigue funcionando... Y, como ya sabemos, la contaminación sigue sin aparecer. Con lo cual, más allá de seguir interesados en que todo funcione bien, dijimos Botnia ya fue. Queda sí esperar al segundo semestre de 2009 -según dicen los que saben- para ver lo que dice el Tribunal de La Haya, pero nadie espera demasiadas sorpresas de ello. Y ahora, en pasteras, el objetivo es Ence.

Pero no sólo de pasteras vive el hombre. Sabemos que uno de nuestros grandes problemas es la energía o, más bien, la carencia de ella en cantidades suficientes. Ello nos lleva a dos aspectos importantes que debemos considerar. Uno de ellos es la no existencia de depósitos de hidrocarburos fósiles... O, debería decir, la supuesta no existencia, dado que acaba de develarse que existe gas natural enla Cuenca Punta del Este, noticia que ya ha trascendido internacionalmente, y posiblemente exista también petróleo. Eso no sólo relanza las posibilidades industriales de Uruguay -dado que si el yacimiento es comercialmente explotable y termina aliviando la pesada factura energética, podrán instalarse industrias que sean intensivas en el uso de energía- sino que abre también una veta interesante de cooperación, investigación y desarrollo en el área petroquímica. Hay que tener en cuenta que en este momento las energías no renovables provenientes de combustibles fósiles representan el 58% de lo que se usa en Uruguay; el 30% de la factura por importaciones fue para pagar petróleo (ver Economía del diario Ultimas Noticias, edición del 24/6/08).

Entre la biomasa con la que se genera energía que se vuelca a la red en Botnia y se hará lo mismo en Ence y en las pasteras que sigan, el biodiesel que empieza a producirse en el pais en plantas como EcoDiesel o Copagran, un ejemplo de lo que son los biocombustibles en general, los parques eólicos que ya se están instalando, y las fuentes tradicionales como la leña -que es, en definitiva, también biomasa- la energía hidroeléctrica, y la derivada de los combustibles fósiles (que quizá por fin tengamos también nosotros) el panorama empieza a no pintar tan negro. Pero aún así, deberemos abrir una nueva discusión, que es la incorporación o no de la energía nuclear. La discusión está abierta. No en vano el gobierno designó como director de Energía a un experto en temas nucleares y espero en este espacio empezar a dar información para prepararnos para esa discusión.

Uruguay se despereza también en otros aspectos, aunque muchas veces nos desesperemos al ver como convive el desarrollo con la desidia. Un punto central en el desarrollo de este país es la logística. Uruguay está desarrollando una política de estado para convertirse en centro logístico y proveedor de servicios portuarios para la región. El 60% de los contenedores que se mueven en Montevideo son de transbordo, casi en un 80% para Argentina. Hay estimaciones que indican que 1 de cada 5 contenedores de carga nacional no pasa por Buenos Aires y prefiere operar en Montevideo.

"Lo que Uruguay está entendiendo, y nosotros no, es que hay que integrar los puertos a la logística, que los puertos son clave para el comercio exterior, y que el comercio exterior es, en definitiva, el futuro de los países, es decir, su desarrollo", razonó Gustavo Anschutz, presidente de la Asociación Internacional de Profesionales de Puertos y Costas (Aippyc).

Partamos de la base de que no es necesario competir restando sino sumando. Un ejemplo de esta cooperación (como la que señalaba ayer entre Botnia y Celulosa Argentina) es la que ocurre ya hoy con el puerto de Concepción del Uruguay pese a que, como no podía ser de otra manera, la ACAG batalla para evitar el dragado del río porque podría favorecer a Botnia (argumento falso, como a nadie le sorprenderá). La colaboración entre Concepción y los puertos del litoral uruguayo, Paysandú por ejemplo donde ya Katoen Natie tiene en vista importantes inversiones, es un ejemplo de desarrollo conjunto donde nuestro país está liderando. En este contexto no resulta menor señalar la futura concesión de una nueva playa de contenedores y el proyecto ya en marcha de mover la flota pesquera a Capurro, construyendo dos diques nuevos y un paseo portuario similar al de Puerto Madero en Buenos Aires.

Lo anterior no quiere decir que Uruguay abandone sus rubros tradicionales, sólo que avanza. Ya el año pasado se hablaba del interés de Nueva Zelandia por invertir en Uruguay, y la instalación de tambos de alta tecnología es un hecho. Y la cantidad de empleos directos que produce es similar a Botnia. Y en carne vacuna se avanza en la incorporación de tecnología que si no la convierte en la mejor del mundo -ya sabemos que la mejor carne del mundo es paraguaya ☺- por lo menos la convierte en la más saludable. Lo que me parece importante es que Uruguay está adaptando modelos exitosos e incorporando tecnología en áreas tradicionales y no tradicionales.

Avances en Biotecnología (la instalación del Instituto Pasteur, la creación del primer ratón transgénico uruguayo), en Software (las exportaciones son un 3% del total de bienes, primer exportador sudamericano de software), en la renaciente y balbuceante industria aeronáutica en Uruguay (reverdeciendo los laureles del avión Naybar diseñado y construido en Uruguy en 1947), incorporación de tecnología en la lechería, en la agropecuaria, en la forestación, en logística. Retención de profesionales jóvenes que en otras circunstancias emigrarían. Un paisito que va en camino de graduarse de país y donde siento que es mi responsabilidad contribuir a que ese desarrollo se haga con responsabilidad e inteligencia.

Claro que, junto a todo eso, tenemos la burocracia agobiante, la educación que anquilosa, los defensores de chacras mediocráticas, los cultores del no se puede y es lo que hay. Pero creo que la balanza va inclinándose lentamente hacia ese futuro que está cada vez más cerca y más claro, si uno se fija en los jóvenes que participan, por ejemplo, en Uruguay de las Ideas y su concurso Tus Ideas Valen, o en los chicos liceales y de UTU que reiteradamente ganan premios de la NASA (como por ejemplo, la primera estación espacial uruguaya ☺). Como se dijera en caso de que los estudiantes del Liceo 4 de Maldonado ganaran en 2007 el Gran Premio de la NASA, espero ver una bandera uruguaya en la luna.

Bueno, como ven, hoy quería comentarles mis pensamientos durante la caminata y por qué, aunque muchas veces la realidad me da con la puerta en las narices, aún tengo esperanza, ganas y convicción.

Per aspera, ad astra.











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viernes, 20 de junio de 2008

¡Prepárence!

 


Sí, claro, ya sé que el título está mal escrito. Como dicen los profes, me equivoqué a propósito, a ver si estaban atendiendo...

Bueno, no, la verdad es que no me pude resistir al juego de palabras porque, obvio, vamos a hablar de Ence. Coincidiendo con el solsticio de Cáncer -de hecho, juso a la hora en que empiezo a escribir esto- y el comienzo del invierno, ha sido firmado el decreto que concede la Autorización Ambiental Previa (AAP) a Ence, para que pueda empezar a construir su planta en Punta Pereira. El documento completo puede obtenerse del sitio web del ICI, aquí comentaremos sólo algunos de los aspectos más importantes.

En primer lugar, queda claro para todos los que hemos seguido el proceso con Botnia, que esto no es el permiso para operar una planta de pasta de celulosa, sino sólo el permiso para construirla. Seguirán luego las etapas pertinentes para que se le otorgue finalmente el permiso para operar, pero ese momento está aún lejano en el futuro.

En segundo lugar, y para sacarnos de encima ese tema también, está claro que la planta se construye a la vera del Río de la Plata, no sobre el río Uruguay, por lo cual ni la CARU ni el Estatuto del Río Uruguay tienen nada que ver aquí.

Y en tercer lugar, analicemos someramente, ya habrá tiempo de verlo en detalle, cuáles son los elementos más interesantes de este documento. El mismo está dividido en dos grandes partes. Por un lado, un relatorio de los pasos que se han dado para llegar a este hito. Por otro, cuáles son los requisitos que se le piden a la empresa para autorizarle la construcción de la planta.

En la primera parte del documento hay tres elementos destacables. Uno es la declaración de que en cumplimiento de la normativa, el Informe Ambiental Resumen estuvo de manifiesto durante el período reglamentario, lo que permitió que las organizaciones sociales interesadas presentaran sus reparos y objecciones. El segundo punto destacable es que se hace mención explícita a la Audiencia Pública realizada el 1 de Abril, y a los documentos y planteos que allí se realizaron. Y, finalmente, que todos estos documentos y objecciones fueron evaluadas e incorporadas adecuadamente por la Dinama como requisitos solicitados a la empresa.

A continuación, en la segunda parte del documento, se da la AAP pero con ciertas condiciones. Esas condiciones son las generales que surgen de la tramitación del permiso y algo más:



Y esas son 21 condiciones que tienen que ver con la calidad del agua, las inmisiones en el ambiente fuera del predio de la planta, las condiciones paisajísticas, compensación social a la población del lugar, garantías, etc.

Una cosa que puede parecer rara en una primera lectura es que se impongan límites a las emisiones gaseosas y líquidas, así como al tratamiento de los residuos sólidos, cuando esto es un permiso de construcción y no de operación. Lo que ocurre es simplemente que nunca se podrían conseguir los estándares solicitados si la planta no fuera construida de acuerdo a las mejores técnicas disponibles, y ello debe quedar claro desde un principio. De hecho, en el documento se lee explícitamente que la operación de la planta deberá ajustarse a las BAT (Best Available Technologies, Mejores Técnicas Disponibles) del IPPC de la Unión Europea.



Es interesante notar que el documento incluye valores específicos para las emisiones que no están regladas ya en el decreto aplicable (Decreto 253/979). En particular, respecto a las emisiones gaseosas, el documento incluye dos tipos de límites. Por una parte se refiere a los datos de emisiones, es decir, qué es lo que la fábrica va a largar al aire. Dado que en la fábrica hay dos puntos clave de emisión de gases olorosos (la caldera de recuperación y el horno de cal), el documento establece límites precisos para ambos casos



Pero, adicionalmente, el documento establece límites también precisos y detallados respecto a las inmisiones en el ambiente fuera del predio de la fábrica. Esto tiene que ver con aquella vieja discusión acerca de si se miden los valores en la chimenea de Botnia o en Fray Bentos. Bueno, los dos.




Finalmente, se establecen los límites de vertidos al curso de agua, para los cuales se aplica el Decreto ya mencionado y, adicionalmente, los siguientes límites, que no están contemplados en el decreto




En este sentido, lo más importante está contenido en este enunciado



En otras palabras, se está aplicando un principio de prevención de la contaminación de tal manera que rija el concepto europeo de que quien contamina paga. En este caso, para evitar la contaminación se pide, a priori, que si se espera que el vertido incremente algún parámetro controlado que ya esté elevado (el caso del fósforo en el río Uruguay) se hagan las inversiones necesarias para mitigar ese incremento (lo que se logró en el caso de Botnia, por ejemplo, con el tratamiento en la planta de efluentes de la fábrica de las aguas servidas de Fray Bentos).

Como principio, parece bueno, veamos como sigue el proceso.




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jueves, 12 de junio de 2008

Aquí están... estos son...

 


Luego de mucho tiempo, se ha revelado el misterio.

Nada menos que Radio Máxima, la radio independiente y objetiva de la ciudad de Gualeguaychú, nos acerca una noticia bomba.

Como quizá Uds. hayan leído en La República, la bancada de ediles del Frente Amplio del departamento de Río Negro citó a representantes de la empresa Botnia para el miércoles 11 de Junio (ayer) a fin de informar sobre la cantidad de operarios que trabajan en la planta de celulosa de la ciudad de Fray Bentos. Ya saben Uds. que nuestros amigos de la ACAG -los mismos que dicen que Botnia "durante el día no trabaja para que no se vea la gran contaminación que produce"- y la Profesora Delia Villalba (a la que Palometa me pide que trate bien) dicen que sólo 33 fraybentinos trabajan en la fábrica. Ya sabemos también que, en su opinión, Fray Bentos está en la cruel inopia y a punto de desaparecer.

Bueno, pues nada menos que Radio Máxima la, repito, imparcial, independiente, objetiva y siempre bien informada radio de Gualeguaychú, nos informa que efectivamente la Gerente de Comunicaciones de Botnia, Florencia Herrera, se presentó ante los legisladores y dió los números de trabajadores.

¡Cha, cháaaaaaannnnn! ¡Esto es mejor que mis descubrimientos en la feria de Tristán Narvaja!

Suponiendo que los números que cita Máxima sean los que efectivamente transmitió Florencia (ya se sabe que Máxima accede a información mucho más fidedigna de la que puede recopila este cronista, pero dado que hay un duende de las imprentas, ¿quién dice que no haya uno para las radios en internet, y Máxima se equivoque?) podemos construir esta pequeña tablita.




Como se puede ver allí, los famosos y denostados "300 puestos de trabajo" y los "33 fraybentinos" han sufrido una transmutación multiplicándose casi por 3 el primero y por 6 el segundo.

Digamos que, comparando el tamaño poblacional de Argentina y Uruguay, es como si en el PIG de Gualeguaychú hubieran instalado una industria que diera 10.332 puestos de trabajo. O, comparando el tamaño relativo de Gualeguaychú y Fray Bentos, como si hubieran instalado una industria que le diera empleo a 577 habitantes de la ciudad de Gualeguaychú. Para hacerse una idea de lo que esto significa, ello sería el 58% de todos los empleados públicos que tiene el Municipio de Gualeguaychú. No parece nada despreciable.

Una constatación lateral es que ¡nos estamos quedando sin finlandeses! Es terrorífico, nuestro país que aspiraba a mejorar el tango rioplatense con ciertos toques de tango finés, y que ya había aceptado el sauna a 120 grados como una actividad lícita de socialización de hombres grandes que se autoflagelan con ramas de árboles, hete aquí que se ve reducido a la desesperación de comprobar que sólo el 2% de los empleados de las plantas son del país del norte, mientras que los gauchos de las pampas sudamericanas han copado las delicadas operaciones de manipulación de los cientos de productos químicos peligrosos. Demos gracias que los previsores e ilustrados integrantes de un caracterizado Grupo de Profesionales, que integran la Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú, integrado por el Médico Dr. Martín I. Alazard, Ingeniero Químico Jorge H. Razetto y el Licenciado en Ciencias Bioquímicas Carlos A. Goldaracena, han confeccionado una GUIA PRACTICA DE ELEMENTOS QUIMICOS UTILIZADOS (se supone que en Botnia pero no se lo pone en mayúsculas, es un poco como el innombrable en los libros de Harry Potter). Seguro que ella ayudará a salvar más de una vida cuando la planta se les escape de control a los uruguayos que, ya se sabe, no son finlandeses.

Bueno, tras estas curiosas reflexiones, a uno -que no es nadie, como decía Wimpi- se le dió por jugar con los números y hacer otra tablita, que se muestra abajo.




Y vemos acá que siendo la población de Fray Bentos menos del 1% de la población del país, resulta que los operarios provenientes de esa ciudad representan el 20% de la fuerza laboral de la planta. Lo mismo sucede con los rionegrenses (¿o rionegrinos?) todos, que de ser menos del 2% en el total del país coparon nada menos que el 34% de las posiciones disponibles.

Y Montevideo, que es nada menos que el 40% del país, tiene una terrible subrepresentación. Es 57 veces más grande que Fray Bentos y tiene la misma proporción de la fuerza laboral en Botnia. Esto es claramente una injusticia con la Muy Fiel y Reconquistadora Ciudad de San Felipe y Santiago. Voy a tener que hablar con mi viejo amigo Ehrlich a ver si no es que el amigo Lafluf lo madrugó ☺

En fin, espero que este ejercicio de ironía (digo, por si hay quien no se hubiere dado cuenta de eso) ayude a desterrar otra de esas falacias tan extendidas, la de "la baja participación de ciudadanos rionegrenses entre el personal de la fábrica de celulosa de Botnia, que según nuestra información estaría reducida a unas pocas decenas de personas del departamento".

Como siempre digo, sic transit gloria mundi, que fuera traducido al uruguayo por nuestro folkórico filósofo popular, ex-Ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, como:

¡No sea nabo, m'hijo!




Los datos presentados por Botnia (cortesía Jorge Balseiro Savio, ICI)










































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