
Podríamos decir que la historia refleja a una Alicia perdida en el país de los egos, donde los inmortales buscan nuevos seres para alimentar la vida de sus cuadros o de su arte.
Me gustó mucho esa parte del "país de los egos" porque no hay nada mejor para volver flácido un ego ambiental-nacionalista inflamado que un buen accidente industrial como el que Pamer acaba de sufrir. Así que, lecciones de vida, veamos qué lecciones podemos sacar de este accidente.


Hay dos aspectos importantes que destacar de esta entrevista, toda ella muy interesante. Uno es cuando el Ing. Cantoni dice
JLC - Los papeles para envase se fabrican con materia prima 80 por ciento reciclada y 20 por ciento pulpa virgen; en los papeles tisú prácticamente el 100 por ciento es reciclado.

La segunda información importante en ese artículo es que Pamer usa leña como combustible principal. Véase el siguiente diálogo.
JLC - Como combustible usamos alrededor de 40.000 toneladas de madera al año, lo que nos ha permitido liberarnos de lo que quiera el ministro de turno con respecto al precio del petróleo.
EC - El jueves pasado ustedes no se amargaron…
JLC - No mucho.
EC - Cuando aumentó el fuel oil se alegraron de haber optado en su momento por una caldera que funciona a leña.
JLC - Absolutamente.

Sobre la noche del domingo se supo que había ocurrido un derrame, aparentemente de fuel-oil, en Pamer.
Anoche vecino llegó hasta Redacción para expresar su preocupación por vertido que salía desde zona de fábrica PAMER y cruzaba el río Negro hacia la costa Norte, llegando hasta los arenales de playa del Biguá. Presentó testimonios fotográficos obtenidos entre las 18.00 y 18.30 horas de ayer, desde el aire, que permiten ver claramente una mancha, en apariencia superficial, de producto derramado desde donde se ubica la papelera chaná.
La fotografía no es extraordinaria, pero refleja efectivamente el derrame que, lamentablemente, fue negado en primera instancia por la empresa. Tanto el diario El País de Montevideo, como Acción de Mercedes dan hoy más detalles del insuceso. De esos artículos entresacamos las siguientes informaciones.
Dos mil litros de fuel oil fueron a parar al arroyo Bequeló por una fuga en una caldera de la empresa papelera Pamer, instalada en Mercedes desde 1937. Mil de ellos llegaron al río Negro, informó a El País Marcelo Larrobla, de la Armada Nacional.
Para intentar evitar que el combustible llegara al río Negro, la empresa colocó una barrera de contención con troncos en la desembocadura del arroyo, casi en el río Negro.
"Es una pérdida de un tanque viejo, que se pinchan con los años", dijo a El País Alicia Torres, directora de la Dinama.
Ahora la Dirección de Medio Ambiente tomará "conocimiento vía administrativa de cuáles son las actuaciones de la empresa para remediar el problema. No podrá usar ese tanque hasta que se le hagan reparaciones", explicó Torres.Desde 2007 Pamer está imposibilitada de producir celulosa por decisión de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama).
Antes de ese año la empresa pastera producía celulosa y arrojaba al río Negro una sustancia contaminante denominada licor negro sin ningún tratamiento.
Alicia Torres, directora de la Dinama, informó a El País que "por ahora está detenida la producción de celulosa hasta que no presente un plan de qué va a hacer con el licor negro". Hoy el papel y el cartón que fabrica la empresa es a partir de celulosa comprada.
Torres dijo que a Pamer "le falta una planta de tratamiento de efluentes de determinados subproductos de la fabricación de celulosa, por ejemplo el licor negro".
En una nota de El País de 2006, la directora de Medio Ambiente informó que Pamer no trata sus efluentes.
En aquel momento la empresa afirmó, a través de un comunicado, que "existen tratamientos internos de retención de material en suspensión y el efluente se diluye en aguas del río en la zona de descarga en más de 300 veces. La materia orgánica introducida al río, es rápidamente asimilada por éste por mecanismos naturales de autodepuración".
Confirmó que a pesar de no estar en su jurisdicción se le permitió el ingreso predio de la fábrica para constatar el lugar de la fuga, "llegamos hasta el sitio mismo, realizamos relevamiento fotográfico, la empresa colaboró".
Sostuvo que Prefectura tiene planes de contingencia para este tipo de derrame, "de futuro planteamos la necesidad de mantener reuniones con la empresa y con representantes de la DINAMA a efectos de evitar que esto vuelva a suceder y que haya otro lugar donde se junte ese fuel oil, antes que llegue a las aguas del Bequeló y ruego al río Negro.Considera que la respuesta ante el hecho "ha sido buena, ya que no existían planes al respecto, ni alternativas. Mercedes tampoco cuenta con barreras de contención -se debió hacer en forma artesanal-modernas, plásticas, con una pollera que se mete debajo del agua para evitar que el combustible pase por debajo. Dentro de lo que hay en la zona se adoptaron las mejores medidas para impedir mayor contaminación del medio".
En el primer informe realizado por Acción decíamos que técnico de la empresa consultado indicó que no podía ocurrir el hecho que se escapara fuel oil y llegara al río, que existe cubeta ciega donde depositarían el combustible fugado. Sin embargo ocurrió, según pudo saber el Diario Regional, debido a que la cubeta presentó un orificio importante por donde se coló el combustible y llegó al arroyo y al río.

Respecto a la declaración de la Ing. Torres, me parece poco feliz (por lo menos de la manera en que esa declaración apareció en la prensa). En mi limitada experiencia los tanques de combustible no se pinchan, supongo que usó esa expresión para ser más comprensible a nivel popular.



Otro de los aspectos claramente criticables es la demostración de que no había planes de contingencia o análisis de riesgo respecto al vertido de fuel-oil al arroyo. La primera noticia ya daba un dato curioso, el de que habían erigido una barrera de troncos para contener el derrame, i.e. no tenían elementos apropiados para lidiar con ese riesgo. La noticia publicada hoy por Acción y cuyo extracto di arriba, describe descarnadamente esa falta de análisis, al mencionar el Prefecto de Mercedes c/c José Luis Elizondo la carencia de una barrera apropiada, flexible y con pollera, para contener el derrame.
Finalmente quiero detenerme nuevamente en las declaraciones de la Ing. Torres. Hay dos cosas curiosas en ellas. Una es la razón para traer a colación el tema del licor negro de Pamer y otra su expresión de que Pamer ya no elabora celulosa. Los informes que pude conseguir ─si estuviéramos en el hipódromo podríamos decir from the horse's mouth─ no indican que Pamer ya no elabore celulosa sino que ya no lo hace con el procedimiento Kraft. Igual no es lo mismo y seguro que esa información figura también en la Dinama. No me parece demasiado correcto intentar tranquilizar a la sociedad, si eso es lo que se pretendía, dando una versión deformada de la realidad. Posiblemente la Directora haya recibido un mal asesoramiento en este punto. De cualquier forma, me parece bien que la Dinama se ponga exigente también con las papeleras y pasteras nacionales, por pequeñas que sean, y no sólo con Botnia.
Por otra parte, es irritante pensar que si ahora se le prohibe operar vertiendo el licor negro al río Negro, y antes sí lo hacía, entonces estaba envenenando a un pueblo. Como mis amigos mercedarios parecen gozar de buena salud, hay algo que no cierra. Y para entender lo que es, hay que hacer algunas cuentas. Si vamos nuevamente al informe de IFC que señalé arriba encontramos que Pamer vierte al río Negro, un curso de agua con un flujo promedio de 1.000 m3/s, 20 toneladas de DQO (demanda química de oxígeno) y 8 toneladas de DBO (demanda biológica de oxígeno) diariamente. Puesto así parece un disparate de grandes, así que lo que debemos hacer es expresarlo en concentraciones y relacionarlo con las cosas que ya conocemos. Cambiando las unidades tenemos
DQO = 20 t/d = (20.000.000.000 / 86.400) mg/s = 231.481 mg/s
DBO = 8 t/d = (8.000.000.000 / 86.400) mg/s = 92.592 mg/s
Y pasando ahora a concentraciones
[DQO] = 231.481 mg/s / 1.000.000 l/s = 0.23 mg/l
[DBO] = 92.592 mg/s / 1.000.000 l/s = 0.09 mg/l
Y eso ahora lo podemos relacionar con lo que sabemos de los análisis del río Gualeguaychú, hechos por la Municipalidad para determinar la calidad de las playas, y con las emisiones de Botnia que las tenemos bien registradas. Los números están en el artículo Cuando el río suena, agua lleva y los reproduzco acá por facilidad, intercalando los de Pamer.

En palabras entonces, lo que se oberva allí es que Pamer, debido a su pequeño tamaño de producción y al caudal del río Negro, no contamina, de la misma manera que no lo hace Botnia, dado que sus emisiones expresadas en concentraciones son mucho menores que aquellas que permitieron calificar a las playas de Gualeguaychú como excelentes para baños. Incluso menores que el aporte que el río Gualeguaychú hace al río Uruguay, pese a ser éste seis veces más caudaloso que el río Negro.
Obviamente entonces, los mercedarios nunca corrieron el menor riesgo por las emisiones líquidas de Pamer. Está muy bien pedirles que las reduzcan aún más haciendo el tratamiento correspondiente, pero no hay necesidad de alarmar a nadie con información que dé lugar a suponer que antes se estaba contaminando a la población.

Imprima este artículo a un archivo pdf
(se abrirá una nueva ventana que no debe
cerrarse hasta que se reciba el archivo pdf)
2 comentarios:
Esto es un off-topic, pero para todos los que sentimos el vértigo de lo infinito con 2001, Odisea en el Espacio, hoy es un día triste.
Ayer a los 90 años murió Arthur C. Clarke brillante autor de ciencia ficción y pensador sorprendente. Imagino que cuando el ascensor espacial corra por primera vez, soportado por monofilamentos de carbono, lo hará hacia una estación espacial geoestacionaria que llevará su nombre.
El padre de HAL ha muerto, su obra le sobrevivirá por siempre.
Respecto al artículo en si mismo, vale comentar que el problema del vertido fue completamente superado, con lo que las consecuencias ambientales son nulas.
De cualquier forma me parece importante que las consecuencias para la modificación del accionar de Pamer y para el incremento del control por parte de Dinama no sean nulas. Se habla en estos días de dos hechos relacionados. Por un lado se ha dado cuenta de la contratación de 40 nuevos profesionales para la Dinama, que estarán abocados a reforzar la tare de control. Por otro, se publicó en Radio Máxima que sólo menos del 6% de las industrias entrerrianas tienen permiso ambiental para operar y que si se quisiera controlar a las 1100 y pico industrias sin control se necesitarían más de tresaños efectuando una única visita a cada fábrica por día (sólo tienen UN funcionario para hacerlo).
El vertido de 2.000 litros de fuel-oil no es extremadamente grave ni causó ningú perjuicio ecológico pero demostró la falta de prevención y análisis de riesgo. Ayer se dió un accidente similar en la bahía de Montevideo provocado por una mala maniobra de un buque portugués. En este caso los planes sí estaban en su lugar y rápidamente se controló completamente el accidente, se pusieron las barreras, se trasegó o recogió todo el combustible involucrado en unas 5 horas de tarea.
La crónica cuenta que la agencia marítima Galiciamar elogió la rápida y eficaz respuesta de las autoridades, extremo que fue resaltado en el informe del asegurador internacional.
Así deberían ser siempre las cosas. Nunca se está a salvo de accidentes por más precauciones que se tomen. Hay que estar bien preparado para enfrentarlos.
Publicar un comentario